Sobrevivir al invierno puede ser difícil. Incluso el más feliz puede ser presa de la conocida como “depresión helada” o “tristeza invernal”, una forma de depresión que no suele ser grave, pero que genera falta de motivación y poca energía durante los meses de frío. Sin embargo, aunque esto es algo que entra dentro de los parámetros normales y que puede sufrir cualquiera, podemos tomar medidas para evitar que nos atrape haciéndonos el invierno más duro de lo que ya es muchas veces.
Claves para que la tristeza no te atrape en invierno
- Absorbe el sol
¿Alguna vez has notado cómo los animales buscan ese lado con más solecito de la casa para recargar sus energías? Pues lo hacen por instinto, pero nos ayuda a confirmar que la luz del sol de verdad nos hace sentirnos mejor. La luz solar nos proporciona vitamina D y ayuda a liberar neurotransmisores en nuestro cerebro que afectan al estado de ánimo. Durante los días de invierno, al ser los días más cortos y más oscuros, pasamos mucho tiempo en interiores y la falta de luz solar puede causar que muchas personas se depriman. Y no creas que todo esto es una tontería, pues se dice que Finlandia (donde reina la oscuridad durante gran parte de los meses fríos) es uno de los países con una mayor tasa de suicidios.
Sal un rato a la calle cuando el sol brille, mantén las cortinas alzadas durante el día para dejar que entre más luz o coloca bombillas de tonos cálidos en tus lámparas, capaces de imitar la luz natural… ¡Lo importante es que notes la incidencia de la luz para que brillen también tu mente y tus pensamientos!
- Levántate y sal a la calle
El ejercicio no es solo para mantener un peso saludable y mantenerse en forma, pues ayuda a la mente a liberar químicos capaces de hacernos sentir bien y mejorar el estado de ánimo. Prueba a ir al gimnasio, a salir a caminar o a hacer ejercicio en casa… ¡Los efectos secundarios te durarán horas!
- Mantén una dieta saludable
Ya sea por impulso, por instinto de supervivencia, o por simple aburrimiento, lo cierto es que tendemos a comer más y peor en invierno. Normalmente aquello que decidimos comer en estos casos suele tener un gran efecto en nuestro estado de ánimo y en nuestra energía, pero el tiempo que dura ese efecto es muy breve y no compensa por la mala calidad de los nutrientes que habremos ingerido. Los alimentos refinados y procesados (como el pan blanco o el azúcar) no solo carecen de nutrientes importantes, sino que también causan estragos en nuestros niveles de energía y pueden contribuir a la depresión y a los cambios de humor. Procura encontrar formas con menos grasas y con menos calorías para disfrutar de las comidas y para afrontar el frío del invierno.
- Sé bueno contigo mismo/a
Planea algo divertido y tu humor mejorará solo con el hecho de planearlo y así hasta que llegue el día. Haz cosas que te encanten, como una tarde de compras, un día en el spa, una cena con amigos, una noche en el cine… ¡y quiérete mucho! Recuerda que no es necesario disponer de demasiado presupuesto para hacer planes interesantes o disfrutar de un buen día.
- Relájate y ten calma
Relajarse es algo que deberíamos lograr hacer todos los días, e incluso varias veces en una misma jornada por el bien de nuestra salud. Procura, especialmente durante el invierno, buscar ratitos de soledad y de tiempo libre para disfrutar de un café, de una buena lectura, de un chocolate caliente, o de una profunda reflexión frente a la ventana. Lo importante es encontrar paz y poder descargar las tensiones del día de forma rápida y sencilla.
- Mira el lado bueno de las cosas
El invierno tiene mucho que ofrecer, así que busca maneras de disfrutarlo y de vivirlo plenamente. Practica deportes de invierno como el patinaje sobre hielo, el snowboard, las raquetas de nieve, el hockey, subir en trineo…o simplemente abrígate y sal a caminar y a ver las luces que poco a poco van dando paso a la Navidad. Mantenerte activo/a aumentará tu energía y verás el invierno bajo una luz mucho más positiva.
- Haz nuevos amigos
¿A quién vas a llamar cuando estés bajo de ánimos por culpa del frío y necesites un buen abrazo? Pues a la familia y a los amigos, a quién si no. Cuida mucho a las personas que quieres para poder contar siempre con ellas y no desaproveches la oportunidad de conocer a gente nueva en otros espacios y hacer nuevas amistades y contactos.