El amor propio es un estado de amor hacia nosotros mismos que se manifiesta por nuestro cariño físico y espiritual. Es un estado de bienestar que algunos también llaman autoestima, en el que se reconocen las debilidades pero sin necesidad de resaltarlas; por el contrario, se trabaja todos los días motivado poniendo en práctica las fortalezas, pues solo desde allí se puede aportar algo bueno para el mundo.

Consejos para reforzar la autoestima


  1. Mantén la autoconciencia

El amor propio no trata de negar lo que somos. Alguna veces no estamos orgullosos de nuestros actos, pero hay que estar atentos de lo que se piensa y se siente cuando actuamos de manera positiva y negativa. Esa conciencia permite un mayor autoconocimiento y nos acerca a un ser más virtuoso.

  1. Desarrolla un plan de vida

Desarrollar un plan de vida significa tener un mapa con la ruta hacia nuestros propósitos, es tener clara la misión y la visión de vida. De esta manera se evita perderse en el camino, lo cual es muy fácil cuando se vive satisfaciendo las necesidades de los otros.

  1. Pendiente de tu cuidado personal

El cuidado personal no es parecer una súper estrella todos los días, ni comprarte ropa cada vez que salgas. El cuidado personal es alimentar tu espíritu con una buena lectura y sostener relaciones sanas. También significa alimentarse bien y hacer ejercicio todas las semanas. Claro que, oler bien, lucir un bonito cabello o llevar una alimentación sana, también puede formar parte del cuidado personal y hacer mucho por nuestra autoestima.

  1. Aléjate de lo que te intoxica

Hay relaciones que resultan tóxicas, debemos evitar a las personas que nos quitan energía para estar feliz. También existen situaciones que debemos aprender a manejar, es necesario decir “no” cuando no se quiere o no se puede, ya que esto es parte del amor propio también.

  1. No te valores en función del amor ajeno

Muchas personas se valoran en función del valor y la estima que los otros le dan o le dicen tener. ¡Jamás cometas este error! Incluso nuestros padres, los seres que más deberían amarnos, se equivocan haciendo calificaciones erradas a nuestra persona. Valórate en función de lo que eres para ti, no de lo que eres para los otros.

  1. Perdónate siempre

Y para terminar, y sobre todas las cosas, perdónate siempre. Podemos ser nuestros peores verdugos de por vida cuando nos equivocamos. Aunque la falta haya sido muy grande es necesario rectificar, perdonar y continuar. La única forma de corregir el error cometido es buscando alternativas para la solución, pero siempre desde el amor propio, desde el perdón.

La autoestima es la clave de la motivación para vivir sanamente, refuérzala todos los días un poco.