Dicen que los poemas son una de las formas más bonitas que hay en el mundo de expresar el amor o cualquier otro tipo de sentimiento. Sobre todo en el caso del amor, este tipo de escritura es, sin duda, la que se considera de un estilo más romántico y sentimental, precisamente por esa delicadeza y ese canto escrito que suponen los poemas en general, y en este caso y sobre todo, las poesías de amor.
Pueden servir los poemas de amor para enamorar, para hacer declaraciones de sentimientos abiertas, para agradecerle a una persona lo feliz que nos hace, o incluso, para llorar un desamor o resarcirnos mediante la palabra escrita de situaciones tristes y desconsoladoras. Y es que dicen que el sentimiento de la tristeza es uno de los más proclives a la hora de lograr esa inspiración que la poesía requiere.
Al igual que se han escrito cartas de amor a lo largo de toda la historia, en las cuales se buscaba conquistar a la otra persona, recordarla, mantener una conversación y una relación en el tiempo y la distancia con ella…se han escrito poemas de amor cortos, más extensos, con rimas y sin rimas. Es verdad que este tipo de escritura requiere algo más de disciplina y habilidad artística y creativa que la mera redacción de una carta. Pero lo cierto es que la calidad de los sentimientos que se insertan en una manifestación escrita, tan solo depende de nosotros mismos y de nuestra forma de sentir y de expresarnos con los demás.
Todos necesitamos tarde o temprano manifestar la forma en la que nos sentimos por dentro, y la imposibilidad muchas veces de llevar esto a cabo por falta de confianza o vergüenza, hace que a la hora de estar en soledad con nuestro propio yo, en la intimidad de nuestro hogar o nuestra habitación más personal, dejemos volar la pureza de nuestro corazón, nuestros anhelos y nuestros sueños e ilusiones más inconfesables. Una vez conseguida esa comunión y esa sinceridad con nosotros mismos, podremos alcanzar también esa pasarela que conduce a la manifestación de nuestro pensamiento en forma de palabras escritas e hiladas con corazón.
¡Anímate a probar!
¿Te gustaría escribir un poema de amor y no terminas de dar con la fórmula? Pues te ayudamos con unos sencillos pasos:
- Pregúntate a ti mismo el motivo por el cual deseas escribir un poema. ¿Porque te gusta escribir y quieres probar una nueva técnica hasta ahora desconocida? ¿Porque te gusta alguien y no sabes cómo decírselo? ¿O quizá quieres hacerlo para desahogarte en soledad y quitarte un peso de encima a nivel anímico? Lo cierto es que pueden ser muchas las situaciones que nos empujen a querer redactar y dar forma a un poema, pero tener claros nuestros objetivos sin duda nos ayudará a ir dando con el resultado que buscamos.
- Deja los miedos a un lado y quítate el yugo de la vergüenza, ese que nos paraliza y nos impide vivir como es debido, libremente. Si eres una persona tímida de tomo y lomo o demasiado insegura para alcanzar tus objetivos de forma directa, tal vez sea bueno intentar escribir lo que sientes. Tú mismo terminarás sorprendiéndote de hasta dónde has conseguido llegar siendo sincero contigo frente a una hoja en blanco. De primeras no te preocupes por la estética del poema. Simplemente deja volar tu imaginación y escribe con corazón.
- Escribe ideas sueltas, busca sinónimos, rimas que sean agradables y no forzadas, expón aquello que sientes o quieres poner de manifiesto en tu texto…y verás cómo poco a poco la estructura de tu poema va tomando forma. Busca palabras con las que ir formando determinados versos de amor cortos, y según vayas cogiendo habilidad, podrás crear un poema más extenso y complejo. No te desanimes y, sobre todo, se original y no busques imitar a nadie.
Gustavo Adolfo Bécquer, José de Espronceda, Víctor Hugo, Carolina Coronado, Edgar Allan Poe, Rosalía de Castro, Novalis, E.T.A. Hoffmann…son algunos de los mayores exponentes de la poesía amorosa en todo el mundo y los creadores de los mejores y más destacados poemas románticos cortos y extensos de la literatura universal. Inspírate e en sus trabajos, observa de qué forma pusieron tinta a sus sentimientos más profundos, felices e infelices, y toma las riendas de tu propia historia. Recuerda que leer mucho es una de las mejores formas de lograr escribir y de hacerlo bien. Y mientras alcanzas tu propio camino en el mundo de la escritura y logras tus objetivos propuestos, déjate llevar por los mejores poemas con imágenes de toda la historia que te proponemos. Sacarán lo mejor que hay dentro de ti.