En ocasiones la amistad se puede tornar complicada y no entendemos por qué ocurre. Los amigos se alejan, se distancian o, lo que es peor, desaparecen y no los volvemos a ver. Es cierto que la vida sigue su curso y que esto ocurre muchas veces a pesar de las grandes amistades que tengamos, pero muchas otras veces nuestra actitud puede haber hecho también posible que alguna de dichas amistades se desvanezca.

Si alguna vez has perdido a algún amigo y continúas preguntándote por qué ocurrió, es bueno que tengas presente que tal vez pudiste hacer o decir algo que influyese en tu amigo/a, e hiciera que poco a poco fuese dirigiendo su camino en otra dirección opuesta a la tuya.

 

Frases que nunca deberías decir a un amigo

  • Eres insoportable.
  • No te entiendo nunca.
  • Solo dices tonterías.
  • Hay gente que tiene problemas peores a los tuyos.
  • Estoy muy ocupado para salir, tengo otros planes.
  • Siempre hablas de lo mismo.
  • A veces te crees el ombligo del mundo.
  • No vi tu llamada.
  • He quedado con otros amigos, ya nos veremos.
  • Solo haces caso a tus amistades nuevas.

 

Aunque estas frases son orientativas, sirven para hacerse una idea de la cantidad de veces que podemos expresarnos de forma errónea con aquellas personas a las que queremos, o de cómo dichas palabras pueden ofender y lastimar al otro haciendo que deje de comprendernos y que pierda las ganas de pasar tiempo a nuestro lado.

Las palabras pueden herir muchas veces igual que las armas, y por eso es muy importante que pensemos antes de hablar y que nos pongamos siempre en la piel del otro. Solo así evitaremos confusiones y malentendidos que se podrían alargar fatalmente en el tiempo, haciendo que a la larga nunca volvamos a ver a personas que lo han significado todo para nosotros.

Tampoco se trata de que no puedas decir lo que piensas o de que no puedas manifestar tu descontento ante alguna ocasión o actitud de tus amistades… ¡mucho cuidado! No dejes pasar la oportunidad de decir lo que piensas siempre, pero escogiendo con cautela aquello que quieres decir o que sientas con las palaras más adecuadas. Recuerda que se trata de establecer un diálogo con el otro, no una confrontación o pelea absurda que pueda terminar acabando con vuestra preciada amistad.

¡Sé responsable con tus palabras!