Viajar es una actividad que se ha hecho desde tiempos milenarios, ya que los nómadas ya eran personas que veían en la exploración un recurso para descubrir, crecer y desarrollarse como civilización.
Los viajes en sus orígenes se debían principalmente a la búsqueda de alimentos y agua, o al escape de climas inclementes; sin embargo, el ser humano ha aprendido a adaptarse encontrando comida, agua y buen clima; esto ha hecho que sus exploraciones sean cada vez menores, perdiéndose también las ventajas psicológicas de viajar.
¿Cuáles son los beneficios psicológicos de viajar?
- Te cargas de energía al romper la rutina
Nuestra vida es una constante rutina: levantarse, comer, ir a trabajar, pagar las facturas, dormir, volver a levantarse… y así sucesivamente. Cuando dedicamos mucho tiempo a una misma rutina, actuamos en automático y vamos perdiendo interés por nuestro entorno y energía para vivir, dejando de ver lo que nos rodea, dejando de hacer cosas tan sencillas como oler las flores y sentir el viento. Viajar es como darte una bofetada para que despiertes en medio de esa temida y cansina rutina. Viajar nos carga de energías renovadas.
- Pones un alto a los problemas de siempre
Nuestra forma de vida consumista y el orden social que establecemos, nos mete en muchos problemas económicos y sociales. Cuando no resolvemos los problemas pequeños, dejamos que se nos acumulen convirtiéndose en un gran problema. Y salir de dichos problemas no es una tarea fácil. La solución muchas veces está en frente de nosotros mismos, pero para verla tenemos que salir de la burbuja que nosotros mismos hemos construido. Un viaje es un pinchazo a la burbuja.
- Encuentras soluciones innovadoras
Además, viajar significa conocer gente nueva, encontrar soluciones diferentes a problemas cotidianos, conocer e intercambiar culturas… Cuando viajas a países con culturas muy diferentes a la tuya te puedes impresionar de la cantidad de rutinas establecidas sin razón que tú mismo te has impuesto. Este intercambio cultural enriquece a cualquier viajero, quien seguro regresará a su hogar con soluciones más creativas a sus problemas de siempre.
- Fortaleces los lazos familiares
Viajar con la familia puede ser una gran oportunidad para acercarse más, descubrirse con nuevos gustos. Es una oportunidad para que los hijos descubran a sus padres en una actitud relajada, lo que no es fácil dentro de una rutina laboral estresante. Puede que se den cuenta de que la pesca es una actividad que tienen en común o que el surf es algo que jamás harían en la vida. Encontrar puntos en común, definitivamente, fortalece cualquier grupo familiar.
- Mejoras tu autoestima
Viajar también es una gran oportunidad de conocer gente nueva y dejar amigos por todo el mundo. Encontrarás personas con tu misma afinidad, tus mismos problemas y preocupaciones. Encontrarás gente más fuerte emocionalmente que tú, quienes te ayudarán, y gente más débil a la que podrás ayudar. Esto levanta la autoestima y permite un mayor desarrollo personal.
Recuerda que viajar debe o debería estar en tu agenda del año entrante 2017. Planifica un viaje que cubra tus necesidades personales y ¡aprovecha todos los beneficios psicológicos de viajar!